En España, el envejecimiento de la población se ha convertido en una tendencia cada vez más evidente, y se proyecta que el porcentaje de personas mayores de 65 años aumentará significativamente en las próximas décadas, así lo demuestran los datos y gráficos proporcionados por el INE. Este hecho se atribuye a dos factores principales: una tasa de natalidad históricamente baja y una esperanza de vida en constante aumento.
Aunque es muy motivador el poder tener una esperanza de vida cada vez más alta también nos surgen otras preocupaciones adicionales. Como consecuencia de este envejecimiento poblacional cada vez más adultos/as deben ocuparse del cuidado de sus padres y/o madres. El cuidado de las personas mayores puede ser un desafío tanto emocional como logístico para las familias.
El envejecimiento se trata de un proceso complejo que afecta no solo a la persona mayor, sino también a todas las que la rodean. Desde los aspectos físicos hasta los emocionales y sociales, el envejecimiento impacta en múltiples dimensiones de la vida. Para las familias, esto supone enfrentarse a retos emocionales, financieros y logísticos que a menudo no son fáciles de manejar. Entender esta perspectiva amplia del envejecimiento nos ayuda a manejar la complejidad de cuidar a nuestros seres queridos mayores.
Cuidar a una persona mayor puede generar conflictos dentro de la familia. Estos pueden surgir por una variedad de razones, como diferencias en las opiniones sobre decisiones médicas o enfrentamientos sobre la distribución de responsabilidades entre la familia. Otro factor clave es la comunicación, que si es deficiente lleva a tensiones, incomprensiones y malentendidos.
Reconocer y entender todos los puntos de conflicto es la base para poder enfrentarlos de manera efectiva y promover un entorno de cuidado familiar saludable y armonioso.
¿Cuáles pueden ser estos motivos de conflicto? Aquí te contamos los más comunes:
Decisiones médicas
Uno de los desafíos más difíciles que enfrentan las familias que cuidan a personas mayores es tomar decisiones médicas importantes. En muchas ocasiones los miembros de la familia pueden tener opiniones diferentes sobre el curso de acción a seguir, y esto solamente puede llevar al conflicto. Para poder llegar a un punto en común es necesario tener una comunicación abierta y honesta entre todas las personas involucradas, sin olvidarse de respetar las preferencias y deseos de la persona mayor (en la medida de lo posible).
Distribución de responsabilidades
El cuidado de una persona mayor necesita de una gran cantidad de tiempo, energía y recursos. Es muy habitual que surjan enfrentamientos dentro de la familia sobre quién debería asumir qué responsabilidades y en qué medida. Algunos miembros pueden sentir que están cargando con una carga desproporcionada, mientras que otros pueden sentirse marginados o no valorados. Es importante tener conversaciones abiertas y honestas sobre las expectativas y limitaciones de cada persona, y que todas las personas implicadas trabajen en conjunto para encontrar soluciones equitativas y sostenibles. La creación de un plan de cuidados compartido puede ayudar a clarificar roles y responsabilidades.
Comunicación deficiente
La comunicación efectiva es vital en cualquier ámbito de nuestra vida, y el entorno familiar no es una excepción. Para mantener relaciones familiares saludables y resolver conflictos de manera constructiva hay que tener una comunicación fluida con el resto de la familia. Sin embargo, en situaciones de cuidado de personas mayores, la comunicación a menudo puede verse obstaculizada por el estrés, la ansiedad y las emociones intensas. Para mejorar la comunicación, es importante practicar la escucha activa, expresar pensamientos y sentimientos de manera clara y respetuosa, y entender que para llegar a buen puerto hay que remar todos/as en una misma dirección. En este caso, velar por el bienestar de la persona que necesita ayuda.
La Mediación Familiar como herramienta de resolución
La mediación familiar es una herramienta muy eficaz para poder abordar cualquiera de las situaciones que acabamos de ver, ofrece un camino hacia la resolución de conflictos que prioriza el diálogo abierto y el acuerdo entre los miembros familiares.
Si todavía no tienes clara la mediación para estos casos, te damos una serie de motivos que hacen que la mediación sea una solución acertada:
- Facilita la comunicación efectiva: Como ya has visto, la comunicación es motivo y solución de los conflictos familiares. La mediación proporciona un entorno seguro y neutral donde cada parte puede expresar sus preocupaciones, necesidades y deseos de manera abierta y respetuosa. Los/as mediadores/as, guían a la familia a través de conversaciones difíciles, fomentando un mayor entendimiento y empatía entre ellos/as.
- Fomenta la colaboración y el consenso: La mediación promueve la colaboración entre los miembros de la familia, alentándolos a buscar entre todos/as soluciones que satisfagan las necesidades de las personas implicadas. Ayudan a identificar intereses comunes y áreas de acuerdo, facilitando el proceso de llegar a un consenso mutuo. Al promover un enfoque colaborativo, la mediación puede reducir la hostilidad y la tensión dentro de la familia, creando un ambiente más positivo y solidario para el cuidado de la persona mayor.
- Promueve la toma de decisiones informada: En el proceso de cuidar a una persona mayor, tomar decisiones importantes puede resultar abrumador y desafiante para las familias. La mediación proporciona un marco estructurado para discutir y evaluar diferentes opciones, asegurando que todas las partes estén debidamente informadas para participar en el proceso de toma de decisiones. Los/as mediadores/as dan información objetiva y recursos útiles para ayudar a la familia a tomar decisiones que reflejen los mejores intereses de la persona mayor.
Llegados a este punto puede dar la sensación que la mediación únicamente implica resolver conflictos, y nada más alejado de la realidad. La mediación tiene como prioridad la promoción de bienestar físico, mental y social de la persona mayor como de aquellos/as que se ocupan del cuidado. Os desvelamos algunas estrategias prácticas para poder mejorar la calidad de vida de todas las partes:
- Fomenta la autonomía y la independencia: Es importante permitir que las personas mayores mantengan un sentido de autonomía y control sobre sus vidas en la medida de lo posible. Esto se traduce en hacerlos partícipes en la toma de decisiones y adaptar el entorno para promover su seguridad y comodidad.
- Prioriza el autocuidado de la persona o personas cuidadoras: Para poder dar una atención de calidad es necesario primero asegurarse de estar bien uno/a mismo/a. Para ello es necesario tomar descansos regulares, buscar apoyo emocional, mantener una dieta saludable, hacer ejercicio y mantener conexiones sociales.
- Implementa rutinas estructuras: Establecer rutinas estructuras proporciona estabilidad y previsibilidad tanto para la persona mayor como para los/as cuidadores/as. Un ejemplo sería incluir horarios regulares para comidas, medicamentos, actividades y descanso.
- Fomenta la actividad física y mental: Mantenerse activo física y mentalmente es clave para el bienestar a cualquier edad. Fomenta la participación en actividades físicas adecuadas para la condición de salud de la persona mayor, así como ejercicios mentales como rompecabezas, juegos de mesa o actividades creativas.
- Cultiva conexiones sociales: Las relaciones sociales son un pilar para el bienestar emocional y mental de las personas. E importante dejar hueco en las agendas para alimentar las relaciones sociales.
- Busca recursos y apoyo comunitario: Explora los recursos disponibles en la comunidad, como servicios de transporte, programas de día para adultos mayores, grupos de apoyo para cuidadores y servicios de asistencia domiciliaria. Estos recursos pueden proporcionar ayuda adicional y aliviar la carga de los/as cuidadores/as.
Si has llegado hasta aquí es porque seguramente te resulta muy útil o interesante todo lo que se ha abordado en este artículo. Si quieres adquirir herramientas prácticas y directamente aplicables para resolver los conflictos que surgen en el cuidado de personas mayores dentro del entorno familiar no te puedes perder el curso de Mediación Familiar de Talentia Formación.